Tú que lo has alcanzado todo, incluso lo que no imaginaba, que te sientes seguro de lo que has obtenido de mis experiencias, que sin lugar ha dudas crees merecer lo que tienes; no te das cuenta que tan solo es un vano espacio de tiempo que olvidaste que es limitado que pronto ya pasará.
Al pensarlo te horrorizas, porque podría agotarse el tiempo, piensas en ese escalón que la vida te ha impuesto a escalar y de pronto llega ese fulano que se lleva todo lo que has abrazado con el alma, eso a lo que tanto te acostumbraste y llegaste a llamar felicidad.
Podrías buscar mil y una maneras para tratar de detener que te roben ese momento de luz que ha llegado a tu vida, pero simplemente estuviste ciego luchando contigo mismo, porque no hay nada que pueda ya parar lo que terrenalmente está decidido.
Sólo vivimos en pausas que nos regala la vida de un tren que su marcha solo para en la muerte. Depende de tí aprovechar las pausas, depende de tí hacerlas memorables, porque cuando tu enemigo llegue ya solo será cuestión de pasado.